¿Desde la búsqueda hasta el diseño o cómo encontrar tiempo para el DISEÑO real en los proyectos de marketing con gran cantidad de datos?

Los diseñadores tienen más cosas que hacer que buscar imágenes e información de productos. Pero cuando sus diseños impresos y en línea implican datos complejos, necesitan herramientas para seguir siendo productivos.

Los diseñadores gráficos tienen a su disposición soluciones de gestión de activos digitales potentes y sin precedentes. Las tareas que antes llevaban días o semanas, ahora sólo requieren minutos. En lugar de esperar a que los especialistas entreguen las imágenes retocadas y los textos tipográficos, un diseñador puede hacerlo todo con un sofisticado software de diseño.

Es una solución mixta, especialmente en los proyectos de diseño de gran volumen y con gran cantidad de productos. Piensa en los catálogos o en los folletos para tiendas con versiones personalizadas para minoristas de varias ubicaciones. El hecho de que se puedan crear infinitas versiones de una pieza complicada no significa que se tengan los recursos para hacerlo. Cuanto más complejo sea un proyecto, y cuantas más variaciones de producto y precio requiera cada versión, más probable es que se pase algo por alto, creando más revisiones de versiones para los departamentos de marketing.

El alto coste del tratamiento de datos

Para los diseñadores gráficos de B2B y B2C, las promociones impresas y digitales suelen incluir productos. Cada pieza presenta no sólo imágenes de alta calidad, sino también descripciones, reseñas, tamaños, colores, precios y/o detalles de la promoción.

Ahora, multiplique eso por el número de productos por página, el número de páginas, la frecuencia de cada promoción y el número de variaciones locales. Con tanta información que hay que manejar, existe el riesgo real de convertir a los diseñadores con talento en operadores de entrada de datos. Contratar más diseñadores no suele ser rentable, sobre todo si no tienen suficiente tiempo para diseñar. Es un ciclo interminable.

El mero hecho de desarrollar y encontrar imágenes también consume un porcentaje del tiempo de un diseñador. Según un estudio, los diseñadores pueden dedicar entre el 20% y el 30% de su jornada a buscar las imágenes adecuadas -o las versiones adecuadas- para utilizarlas en un diseño.

El coste de la mano de obra es sólo un factor. Los errores de selección de datos -la imagen o el precio erróneos para una de las muchas versiones de un catálogo, por ejemplo- pueden dar lugar a reimpresiones, reembolsos e incluso responsabilidades legales. Los diseñadores no sólo tienen menos tiempo para diseñar, sino que son cada vez más propensos a cometer costosos errores.

 

Automatización real al rescate

En los primeros tiempos del diseño de escritorio, la información sobre productos y marketing estaba disponible en muchas fuentes, a menudo aleatorias y desorganizadas. El auge de los sistemas de gestión de activos digitales (DAM) y de gestión de información de productos (PIM) empezó a cambiar lentamente esta situación. Los diseñadores seguían teniendo que buscar con frecuencia en bases de datos en línea y esperar que tuvieran los datos más actualizados.

Además, la información de los productos suele ser una colección de datos relacionados de múltiples fuentes. Asegurarse de que todos los detalles eran correctos -y estaban actualizados- llevaba mucho tiempo, era propenso a cometer errores y hacía que la producción tuviera que correr para cumplir los plazos de salida al mercado.

Afortunadamente, ahora es posible una verdadera automatización de los procesos entre múltiples fuentes de datos y el conjunto de herramientas de los diseñadores, que también se describe en nuestro blog Modern Day Hunting and Gathering, que cubre el poder del plugin LAGO para Adobe InDesign. Mediante un flujo de trabajo colaborativo, los responsables de marketing pueden rellenar previamente una plantilla de InDesign con todos los datos PIM y DAM necesarios, dejando al diseñador libre para diseñar y producir múltiples versiones de una pieza.

Creatividad dentro de las limitaciones

Un flujo de trabajo de diseño con plantillas puede parecer una contradicción, pero no lo es. Con menos horas persiguiendo e introduciendo datos -y esperando que sean datos precisos- los diseñadores pueden centrarse en hacer que la pieza sea atractiva y convincente. También hay decisiones de diseño importantes que no pueden automatizarse. De hecho, son más fáciles gracias a la automatización. En el ejemplo de LAGO, una plantilla puede contener un “bloque” de datos relacionados con un producto concreto, incluida más de una imagen de ese producto. En ese caso, la selección de la imagen adecuada, incluyendo el color, la orientación y la composición, requiere el ojo del diseñador. Como el diseñador no tiene que ocuparse de los detalles de los datos, puede centrarse en las decisiones que afectan a la calidad y el mensaje.

Aunque la automatización puede facilitar la vida del diseñador y hacerla más productiva, nunca podrá sustituir su valioso talento innato.

 

Todo es cuestión de comunicación

Desde las primeras pinturas rupestres, los diseñadores han buscado formas de comunicar ideas importantes de forma visual. La tecnología les ha permitido hacerlo a un público masivo y, más recientemente, de forma que se relacione con cada individuo. Hoy en día, los datos complejos son más relevantes que nunca. Pero tanto si el medio final es la impresión como la pantalla, el mensaje siempre requiere las habilidades de un comunicador visual.

El uso de sistemas avanzados como las capacidades de producción de LAGO para manejar los datos permite al diseñador centrarse en las habilidades que hacen que su comunicación sea eficaz.